La Bella y la Bestia, enésima versión. Carmen y el Diablo avizoran desde las torres de la catedral la Tour Montparnasse, entonces de riguroso estreno (había sido acabada
de construir en 1972).
Trois
petites notes de musique ont plié boutique au creux du souvenir
C'en
est fini de leur tapage, elles tournent la page et vont s'endormir
Mais
un jour sans crier gare, elles vous reviennent en mémoire
Henri
COLPI y Georges DELERUE
Esta es la bonita historia de la recuperación
de una pequeña fracción de tiempo perdido. Ayer, retenidos en casa por el mal
tiempo, me dio por rebuscar entre algunas cajas de cartón en las que había
apiladas fotografías viejas, y de un resquicio entre ellas saltó un sobre con
veintitantas instantáneas de París. Sorpresa. Nos costó algún tiempo situar
aquel viaje en el tiempo. Recurrí a mis agendas, que no tiro una vez usadas, sino
que las voy amontonando en un cajón.
Ocurrió en marzo de 1978, entre los días 22 y
27, es decir de miércoles santo a lunes de Pascua. Hicimos el viaje de ida y
vuelta en autobús, y paramos en un hotelito con mucho encanto, cerca de la
Torre Eiffel, que volvimos a buscar años después para otro viaje, y ya había
cerrado sus puertas.
Fue una excursión fuera del tiempo, y el
extravío de las fotos acentúa esa característica. En 1978 Carmen trabajaba en
Editorial Planeta, y yo estaba al frente de la Federación de Artes Gráficas de
las CCOO de Cataluña. Teníamos dos hijos pequeños, que se quejaban con razón de
que estábamos poco tiempo con ellos. En aquel mes de marzo se empezó a negociar
el convenio nacional de Gráficas. Reuníamos el Secretariado los martes a las 19,30
(días 7, 14 ─reunión retrasada a las 20.30 por una entrevista en Radio
Barcelona a las 18 h─ y 28). El sábado 4, a las 5, hubo Permanente de la CONC;
el 8 por la mañana, una entrevista de coordinación con UGT en su sede, Catalsa;
el jueves 9 una reunión intersindical; el lunes 13 la primera entrevista con la
patronal, y el 16 una asamblea unitaria. De vuelta del viaje, el martes 28
había una nueva reunión negociadora en Madrid, y el viernes 31 hicimos una
asamblea informativa en el cine Princesa. La negociación y las asambleas
seguirían, trepidantes, a lo largo del mes de abril. El 23 tuvimos la
Conferencia de la Federación, y en mayo (días 12 a 15), el Congreso de la CONC.
En el Luxembourg.
En medio de la mêlée disfrutamos del intermezzo
excepcional de ese pas de deux glamuroso.
Nos echamos trabajos y penas a la espalda y paladeamos París con glotonería, como
si fuera un bombón. Hicimos amigos además, en el autobús y en el hotelito. Nos
prometimos volver a vernos, telefonearnos; pero la épica de las asambleas se llevó
por delante la lírica de las ramas floridas de los manzanos.
Hasta ayer. Escaneamos las fotos, nada
artísticas pero memorables, y ahí va una muestra.
Entre las torres de Notre Dame. Abajo, el Sena; lejos bajo
la lluvia, la Tour Eiffel.
Métro Cité. Al fondo, la Sainte-Chapelle.
Joie de vivre.