miércoles, 19 de octubre de 2022

LOS TRES PICOS DE LA CATEDRAL

 


Vista lejana a contraluz de la catedral de Luxemburgo, en el skyline de la ciudad.


(Recuerdos de viaje) 

La catedral de Luxemburgo está clasificada como gótica, por más que en su origen no fuera ni gótica ni catedral. Los jesuitas levantaron la iglesia en el siglo XVII, en el estilo propio de la Compañía. Su transición hacia cimas más altas de la religión empezó con la colocación en su interior de una imagen “milagrosa” o con fama de ello, la de María Consolatrix Afflictorum, avanzado ya el siglo XVIII. Se promovieron entonces reformas para dar un empaque renovado a la estructura eclesial, la más importante del archiducado de Luxemburgo, y se utilizaron para ello las convenciones del estilo neogótico. En 1870 fue consagrada catedral por el papa Pío Nono, no tan conocido por su pontificado como por un avatar que lleva su nombre, creado venturosamente en la “Confitería Isla” de Santa Fe de la Vega1. Ya en los años treinta del siglo pasado, el templo fue objeto de una ampliación importante.

Debió de ser, calculo, en las obras de transición del barroco al neogótico, cuando se definió el tricornio característico que remata la silueta aérea de la catedral. La entrada principal de esta se sitúa en un extremo de la nave del crucero, y las puntiagudas torres gemelas de la fachada primitiva han dejado de ser iguales, como suelen serlo las que llevan en Europa y América el sello constructor de la Compañía de Jesús. A la pequeña extravagancia de estilizarlas y hacerlas distintas, se suma la altura inusual de la linterna que emerge, como un tercer pico agudo, de un cimborrio también atípico. La impresión que da el conjunto es la de un insecto gigante, una especie de saltamontes, posado en el suelo en una postura no del todo estable. El paseo alrededor del complejo catedralicio permite, de otro lado, enriquecer la panorámica con perspectivas cambiantes: los tres picos de la catedral permutan sus posiciones a lo largo del recorrido, como en un baile solemne trenzado en beneficio del espectador.


Los tres picos de la catedral, desde el lado opuesto a la entrada principal.

 

1 Para más información sobre los piononos, acudir en Facebook a José Luis López Bulla y/o Rafael Rodríguez Alconchel.