lunes, 5 de abril de 2021

CUANDO LOS MÉRITOS SON RELATIVOS

 


Babe Ruth con el uniforme de los Yankees de Nueva York (foto, Smithsonian Institution)

 

George Herman Ruth, llamado “Babe” (el Niño), fue un jugador de béisbol legendario. Disputó 22 temporadas en la Major League, que ganó en siete ocasiones, y logró un total de 714 home runs, el no va más. En 1999 la Associated Press, por votación popular, lo proclamó mejor atleta del siglo, por delante de Michael Jordan y Jim Thorpe.

En 1931 un periodista preguntó a Babe si no le parecía escandaloso disfrutar de unos ingresos económicos superiores a los del presidente de Estados Unidos.

El presidente era entonces Herbert Clark Hoover. El país estaba sumido en la Gran Depresión que sucedió al crac bolsístico de 1929. El hambre recorría el país y la ola de suicidios constantes resultaba interminable. Hoover sería barrido en las elecciones presidenciales del siguiente año por Franklin Delano Roosevelt, el hombre del New Deal.

La respuesta que dio Babe al periodista fue lacónica: «He tenido un año mejor que él.»

Cualquiera de nosotros se merece un salario ─en su caso, una pensión─ mejor que la de algunos políticos en el candelero. No hace falta dar nombres.