Fotografía oficial del II ASDE,
tomada del muro de J. Pérez Rey.
Suscribo las
palabras de Joaquín Pérez Rey en su muro de facebook: «Los
resultados del diálogo social merecen ser celebrados, sobre todo cuando
requieren un enorme esfuerzo. Aferrarse a la silla y no darse por vencidos es
la valiosa lección que la comisión tripartita nos deja en este II ASDE. Un
nuevo acuerdo que contribuirá decisivamente a que nuestro país afronte la
crisis social derivada de la pandemia. Gracias a las personas que han
contribuido a su consecución, ha sido un honor compartir mesa con ellos.»
El II ASDE (para los alérgicos a las sopas de siglas), es
el segundo Acuerdo Social para la Defensa del Empleo, que se acaba de firmar.
Los lectores preocupados por la perspectiva económica y por los avances políticos concretos del actual
gobierno de coalición, pueden encontrar un amplio resumen de urgencia, apasionante, en
el blog de culto “Según Antonio Baylos”, en el siguiente link: https://baylos.blogspot.com/2020/06/el-ii-acuerdo-social-de-defensa-del.html.
También es muy recomendable un texto de Jesús Cruz Villalón (http://jesuscruzvillalon.blogspot.com/2020/06/breve-comentario-de-urgencia-al-decreto.html),
más atento quizás a la técnica jurídica, y no tanto como el de Baylos a los elementos
de novedad en la praxis política, con una visión de la democracia que las derechas califican de “autoritaria” porque soslaya las invectivas y las descalificaciones
globales que se lanzan de forma sistemática desde ese rincón del hemiciclo
parlamentario. La nueva praxis se asienta, en cambio, en el sólido trípode
formado por el gobierno y los agentes sociales (sindicatos y patronos).
Que son, no se olvide, quienes van a sacar las castañas reales
del fuego, lejos de los postureos y los brindis al sol de nuestros prohombres y
nuestras promujeres patrios/as, tan felices ellos y ellas por haberse conocido.
El consenso social ─difícil, lo apunta Joaquín Pérez Rey
en su breve comentario, quizá solo comprensible en su totalidad para quienes
hemos estado presentes en mesas de negociación de algún tipo─ está permitiendo avanzar
en la buena dirección, en una situación llena de dificultades y falta de
cualquier sustrato de consenso político. La vía indicada marca la divisoria
entre lo posible y lo no posible. Leo algunas opiniones de gente de Unidos
Podemos en las que se argumenta que, de no prosperar el impuesto a las grandes fortunas,
UP debería retirarse del gobierno.
No se me ocurre ninguna posible animalada mayor.
Incomprensible la afición de algunas personas hacia las
trayectorias de colisión y hacia los asaltos a los cielos por el método de
horadar el muro de la fortaleza en el lugar donde mayor es el espesor del
glacis.
Hay más noticias recientes por las que felicitarse. La
vicepresidenta Nadia Calviño es ya candidata oficial a la presidencia del
Eurogrupo, y la cancillera Merkel ha manifestado su predisposición a sostener
esa candidatura. Guy Ryder, por su parte, ha llamado desde la OIT a nuestra no menos vicepresidenta
Teresa Ribera a participar como experta en la concreción de una transición
energética justa para el conjunto de Europa. La influencia de España en la
Unión crece de día en día, a pesar de los ímprobos esfuerzos de la funesta Dolors
Montserrat, del grupo popular europeo, por enterrarla.
Las políticas progresistas se van consolidando en el país.
Estamos de enhorabuena, por lo menos todas las personas de buena voluntad.