sábado, 21 de diciembre de 2019

UN GAUCHO EN EL CONGRESO



Martín Fierro.

Hay expectación en torno al Congreso de Esquerra Republicana de Catalunya. En elpais se habla de un congreso «decisivo». Habrá que esperar, por si en efecto se producen decisiones de calado o enjundia. De lo que más se habla hasta el momento, sin embargo, es de la necesidad de mantener la unilateralidad en la panoplia estratégica del partido. La ponencia, en la que tal cuestión no figuraba de modo explícito, ha transado un compromiso en ese sentido. Será en cualquier caso un brindis al sol, un bibelot bonito para quien le guste, pero de escasa consecuencia. Las nuevas generaciones de dirigentes de Esquerra saben perfectamente que se trataría de una declaración llena de estrépito y furia pero desprovista de significado, como ya advirtió Macbeth en un contexto distinto y cuando lo suyo ya no tenía remedio.

Lo de Esquerra sí tiene remedio, vaya esto por delante. Dada la trayectoria errática de los "post post post convergentes" (como les llama con malafollá santaferina José Luis López Bulla), Esquerra se ha situado en el centro del universo procesista, con unas perspectivas electorales tan excelentes que están induciendo al patriota sin tacha Quim Torra a huir de las urnas como gato escaldado del agua fría, y posponer indefinidamente cualquier convocatoria electoral mientras no escampe.

En la idiosincrasia particular de Esquerra, de otra parte, la declaración de mantener en la recámara la unilateralidad no tendría más significado que el cumplimiento de un ritual canónico consabido: «Som i serem», «Tornarem a fer-ho», etcétera. Sería muy deseable que, a continuación del introito ad altare dei, se preocuparan de aterrizar en la coyuntura terrenal. Pero no es imposible que, cuando lo hagan, utilicen formas imaginativas y retorcidas, al modo de los augurios que en tiempos pretéritos daba la Sibila de Delfos, que tenían la virtud de que nadie sabía qué había querido decir.

O, para recurrir a otra autoridad tradicional, que se pronuncien con cantaletas al modo de los teros, aves pampinas de las que nos contó el gaucho Martín Fierro. Les recuerdo sus palabras:

De los males que sufrimos
Hablan mucho los puebleros,
Pero hacen como los teros
Para esconder sus niditos:
En un lao pegan los gritos
Y en otro tienen los güevos.