Una imagen ideal de lo que no
deseamos para este país (‘Sandokan al rescate’, carátula de la banda sonora de
la película)
Para quienes estamos
decididamente a favor (excusen que no diga “a muerte”, es una expresión por la
que siento cierta repugnancia) del programa de reformas de este gobierno
progresista, el modelo a seguir por parte de nuestros dirigentes debería ser el
que marcan, además del presidente Sánchez, ministros como Salvador Illa y
Yolanda Díaz, o portavoces como Fernando Simón. Mantienen la serenidad frente a
las provocaciones de la oposición y de unos medios cada vez menos ecuánimes (1),
dan datos y opiniones argumentadas, y se manifiestan con respeto a todos, independientemente
de que esos todos merezcan o no el respeto que se les dedica.
Caso diferente es
el de nuestro vicepresidente segundo, que está recayendo de nuevo en su vieja
tendencia a personificar a Sandokan, el Tigre de la Malasia. Quizás su actitud belicosa
responda a una sugerencia de sus asesores de imagen, pero sospecho que los
asesores de imagen siguen al pie de la letra la norma evangélica de errar, no
siete veces al día, sino hasta setenta veces siete. A Pablo Iglesias le
convendría evitar el fango de las polémicas y dar un perfil más bajo, con un
discurso más centrado en los problemas reales, que no faltan. Lo agradeceríamos
todos y en particular los electores, creo, porque el barullo y el intercambio
de proyectiles de grueso calibre estorban la práctica política y favorecen la
antipolítica.
El esfuerzo
principal de las fuerzas de progreso que sostenemos a este gobierno no debe
ponerse en ningún caso en una política de ojo por ojo, ni en denunciar en el
juzgado de guardia a todo el que se propase, sino en romper la espiral rampante
que se ha generado de degradación de las instituciones en las que se fundamenta
el Estado de Derecho: el Parlamento y las comisiones parlamentarias, los gobiernos
autonómicos, la judicatura, la guardia civil…, y ahora también la libertad de
prensa.
(1) Lean sobre esta
cuestión el oportuno alegato de un periodista de raza como Luis Mari González,
en “Nueva Tribuna”: https://www.nuevatribuna.es/opinion/luis-maria-gonzalez/periodistas-alma-medio-selva/20200528133529175424.html